El 3 de diciembre de este año entrará en vigencia un cambio introducido en el Código Alimentario Argentino cuyo objetivo es reducir el contenido de grasas trans de origen industrial en los alimentos. En este marco, FIC Argentina presenta los resultados de un análisis que releva los ingredientes de alimentos procesados.
(Buenos Aires, 25 de noviembre de 2014). La Fundación Interamericana del Corazón Argentina realizó una investigación sobre 878 productos de las principales marcas que están en venta en grandes supermercados, con el objetivo de analizar el listado de ingredientes de dichos productos para detectar cuáles contenían grasas trans de origen industrial por encima del límite previsto por el Código Alimentario Argentino antes de la entrada en vigencia de la nueva regulación.
En 2010 el Ministerio de Salud de la Nación lanzó la campaña «Argentina 2014 libre de grasas trans» para lograr que todas las empresas de alimentos realicen las modificaciones tecnológicas necesarias para adecuarse al nuevo artículo establecido en el Código Alimentario referente a grasas trans. El artículo exige la restricción del contenido de grasas trans de origen industrial (aceite vegetal hidrogenado) en los alimentos industrializados de acuerdo a estándares internacionales, estipulando que no debe ser mayor a 2% del total de grasas en aceites vegetales y margarinas destinadas al consumo directo y a 5% del total de grasas en el resto de los alimentos. La fecha límite para que las industrias cumplan con esta restricción venció en el 2012 para los aceites y margarinas y alcanzará a los demás alimentos el 3 diciembre del 2014.
El relevamiento, realizado por FIC Argentina durante el 2013, indicó que de los 878 productos analizados, 42 superaban el límite estipulado. Los baños de repostería, los alfajores y los productos de panadería son las tres principales categorías de productos que, según lo informado en el listado de ingredientes, aún tenían un contenido de grasas trans de origen industrial por encima de lo establecido por el Código Alimentario. En el caso de los baños de repostería, el 83,3% de los productos superaba el límite establecido, en el caso de los alfajores, se detectó que el 14,3% de la muestra poseía más grasas trans de origen industrial que lo permitido por el Código Alimentario, y para los productos de panadería, se observó lo mismo en el 10,5% de la muestra.
«Argentina es un país pionero en la región en avanzar con legislación para limitar el contenido de grasas trans de origen industrial en los alimentos procesados y resulta muy alentador constatar que la mayoría de los productos ya informan nulas o mínimas cantidades de grasas trans de origen industrial, de acuerdo a lo que establece el Código Alimentario. No obstante, es de suma importancia que los cambios alcancen a todos los productos comercializados en el país, sin excepción y que se compare la información provista en los paquetes de alimentos con el análisis químico desarrollado por el Estado, a fin de garantizar un monitoreo efectivo del cumplimiento universal de la política», señala Lorena Allemandi, directora del área de políticas de alimentación saludable de FIC Argentina.
El consumo de grasas trans de origen industrial aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, de muerte súbita de origen cardíaco y de diabetes mellitus. Según la Organización Mundial de la Salud, una ingesta diaria de 5 gramos de grasas trans puede aumentar en un 25% el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. Esto se debe a que las grasas trans incrementan el colesterol LDL («colesterol malo») y disminuyen el colesterol HDL («colesterol bueno»). Por esto, la Declaración de Río de Janeiro «América Libre de Grasas Trans» en el año 2008 recomendó su reemplazo.
«Recientemente, durante el 2014, hemos realizado un nuevo relevamiento de rótulos e ingredientes cuyo análisis está en proceso y que muestra resultados similares a los del 2013. Los baños de repostería, los alfajores y productos de panadería continúan siendo los principales productos con niveles elevados de grasas trans de origen industrial, lo cual será un desafío para la implementación de la ley en el futuro cercano. Desde la sociedad civil continuaremos con nuestro rol de contribuir al monitoreo del cumplimiento de la política e informando a la comunidad para promover una alimentación saludable y aumentar la participación ciudadana en el control de las políticas que garantizan el derecho a la salud», sostiene Verónica Schoj, directora ejecutiva de FIC Argentina.
Los resultados de la reciente investigación serán presentados por la directora ejecutiva de FIC el próximo miércoles 26 de noviembre en el Salón Auditorio de Jefatura de Gabinete de Ministros, en el marco de una jornada de grasas trans organizada por el Ministerio de Salud de la Nación. Durante el encuentro se darán a conocer los avances obtenidos en materia de regulación de alimentos industrializados y los compromisos a futuro.