El 22 y el 23 de abril, organizaciones de 12 países de América Latina se reunieron en Buenos Aires para analizar y compartir información sobre las acciones que realiza la industria tabacalera en la región con el fin de obstaculizar las medidas de control de tabaco.
El taller fue organizado por FIC Argentina, organización sin fines de lucro que promueve políticas públicas para prevenir enfermedades crónicas no transmisibles, en conjunto con FIC México, Aliança de Controle do Tabagismo (ACT) de Brasil y la filial colombiana de Corporate Accountability International (CAI), organizaciones que vienen trabajando en el tema desde 2010. A esta iniciativa regional se sumaron ahora nuevas instituciones y países y se propuso delinear un plan de trabajo conjunto.
El tabaquismo es una grave epidemia que provoca enfermedades y muertes en todo el mundo. En América Latina se ha logrado un significativo avance en materia de medidas y leyes para el control del tabaco en la última década, ante lo cual, las empresas tabacaleras expanden sus estrategias de ventas y posicionamiento. Si bien comercializan un producto adictivo y mortal, gozan de una imagen positiva y buscan posicionarse como socialmente responsables.
Las organizaciones de la sociedad civil de América Latina comprometidas con la prevención y promoción de la salud son un actor clave para hacer un seguimiento de las acciones de la industria tabacalera y exponer los intereses comerciales que hay detrás de las distintas estrategias que buscan bloquear los procesos legislativos o influenciar las medidas de salud pública para el control de tabaco.
“El análisis y la puesta en común es esencial para trabajar de manera articulada y evaluar las mejores respuestas posibles ante las acciones de las tabacaleras que tienden a entorpecer las medidas y leyes establecidas por los Estados. Por ejemplo, en Argentina durante más de 40 años la industria ha obstaculizado en forma sistemática la promulgación de leyes para el control de tabaco; recién en junio del 2011 se promulgó la ley 26.687 pero hasta la fecha no se logró su reglamentación. Es necesario dar a conocer esta situación para defender el derecho a la salud en nuestros países”, señala Mariela Alderete, vicedirectora de FIC Argentina.
“La interferencia de la industria en México se ha agravado en los últimos años. Ellos han cambiado su estrategia: de un contacto indirecto mediante lobbying con empresas contratadas han pasado a una aproximación directa, por sí o con grupos de fachada, para presionar a legisladores y tomadores de decisión. Frente a una información endeble y ridícula por parte de la industria, las organizaciones de la sociedad civil, acompañadas de organizaciones académicas, hemos fortalecido la investigación para aportar evidencia, argumentar y persuadir”, declara Erick Antonio Ochoa, Director de Iniciativa de FIC México.
Al finalizar el encuentro, las organizaciones firmaron una declaración conjunta en la que se comprometen a trabajar en colaboración y solicitan a los gobiernos que adopten las medidas necesarias para, por un lado, asegurar la exclusión de la industria tabacalera en la definición y tratamiento de las políticas de salud y, por otro, rechazar acuerdos de cualquier tipo con estas corporaciones, tal como recomienda el Convenio Marco de Control de Tabaco, primer tratado internacional de salud pública promovido por la Organización Mundial de la Salud. Cabe destacar que Argentina, El Salvador, Cuba y Republica Dominicana son los únicos países que aún no han adherido a este tratado dentro de América Latina.
En 2012, FIC Argentina junto a este grupo de organizaciones editaron la publicación “La salud no se negocia. La sociedad civil frente a las estrategias de la industria tabacalera en América Latina”, que reúne evidencia de Argentina, Brasil, Colombia y México referida al accionar de las tabacaleras para interferir en el derecho a la salud.
