fbpx

Envejecimiento activo: beneficios y recomendaciones



Según la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo 2013, el 67,6% de las personas de 65 años o más no realiza actividad física. Sin embargo, incorporarla en la rutina traer muchos beneficios físicos, mentales y sociales.

La evidencia indica que, en comparación con las personas menos activas, los adultos físicamente activos presentan:

  • Tasas más bajas de mortalidad, cardiopatía coronaria, hipertensión, accidente cerebrovascular, diabetes tipo 2, cáncer de colon y de mama
  • Una mejora en las funciones cardiorespiratorias y musculares, una mejor masa y composición corporal
  • Un perfil más favorable a la prevención de las enfermedades cardiovasculares y una mejora de la salud ósea
  • Una mayor salud funcional, un menor riesgo de caídas, un mejor conservación de las funciones cognitivas y un menor riesgo de limitaciones funcionales moderadas y graves.
  • Además, un envejecimiento activo también promueve una mejor calidad del sueño, ayuda a mantener un peso saludable, controla el estrés, mejora la calidad de vida y favorece la socialización.

¿Cómo incorporar la actividad física en la rutina?

Las recomendaciones de actividad física para las personas de 65 o más indican que:

  • Las personas mayores deben aspirar a estar activos diariamente. Durante una semana, la actividad debe sumar al menos 150 minutos (2½ horas) de actividad aeróbica de intensidad moderada en episodios de 10 minutos consecutivos o más.
  • Para aquellos que ya son regularmente activos y están en condiciones de realizar una actividad aeróbica de intensidad vigorosa, se recomienda alcanzar los 75 minutos semanales.
  • Las personas mayores también deben realizar actividades de fortalecimiento muscular de los grandes grupos musculares al menos dos días a la semana.
  • Las personas mayores con dificultades de movilidad deben, al menos dos días a la semana, incorporar actividad física para mejorar el equilibrio y la coordinación, y así evitar riesgos de caídas.
  • Cuando las personas mayores no puedan alcanzar estas recomendaciones debido a su estado de salud, deben mantenerse activos hasta donde les sea posible y les permita su salud.

(Fuente: OMS recomendaciones mundiales sobre la actividad física para la salud 2010)


ALIMENTACIÓN

ALIMENTACIÓN

Los hábitos alimentarios no saludables favorecen la aparición de enfermedades que empeoran la calidad de vida.

ALCOHOL

ALCOHOL

El consumo problemático de alcohol es uno de los principales factores de riesgo de las enfermedades no transmisibles.

ACTIVIDAD FÍSICA

ACTIVIDAD FÍSICA

El sedentarismo afecta a gran parte de la población e incrementa las posibilidades de adquirir enfermedades.