En abril de este año el Ministerio de Salud debería haber emitido una resolución que actualizara las advertencias, a fin de que las tabacaleras las implementaran en octubre. Este retraso implica un incumplimiento de la ley Nacional de Control de Tabaco y una vulneración del derecho a la salud de toda la población, especialmente de los niños, niñas y adolescentes.
(Buenos Aires, 26 de noviembre) En Argentina, la inclusión de advertencias sanitarias en los envases de productos de tabaco es obligatoria desde el año 2011, cuando se sancionó la Ley Nacional de Control de Tabaco. La norma establece que la advertencia debe estar conformada por uno de los 10 mensajes sanitarios establecidos por la ley (por ejemplo, “Fumar causa cáncer”) y debe estar acompañada de una imagen. Además, el artículo 10° de la ley establece que las advertencias deben ser actualizadas por el Ministerio de Salud de la Nación con una periodicidad no superior a dos años ni inferior a un año. A su vez, la regulación establece que se le debe dar a las empresas tabacaleras un plazo de seis meses para adaptarse a las nuevas advertencias.
La última actualización de las advertencias sanitarias fue realizada por el Ministerio en abril de 2019, por medio de la Resolución 623/2019, y las empresas tabacaleras cambiaron sus advertencias en octubre de 2019. En base a los tiempos fijados en la ley, en abril de 2021 el Ministerio de Salud, como plazo máximo, debería haber emitido una resolución para actualizar las advertencias, a fin de que las tabacaleras lo hicieran en octubre del mismo año. Sin embargo, esos plazos no se respetaron lo que representa un incumplimiento por parte del Ministerio de Salud a la Ley Nacional de Control de Tabaco y una vulneración del derecho a la salud de toda la población, especialmente de los niños, niñas y adolescentes.
“Los aspectos relativos al tamaño de las advertencias, su rotación y la disponibilidad de muchas imágenes son muy importantes para asegurar la efectividad de esta política. Si no se rotan las imágenes en los tiempos estipulados se genera un “efecto de desgaste” y las advertencias pierden impacto. Por eso es prioritario que el Ministerio de Salud actualice las imágenes con urgencia para prevenir este efecto”, destacó Marita Pizarro, codirectora de FIC Argentina. Y agregó: “A su vez, es importante que en un futuro cercano el Congreso Nacional amplíe el tamaño de las advertencias sanitarias, el cual no ha variado desde hace más de 10 años, cuando se sancionó la Ley Nacional de Control de Tabaco”.
Las advertencias sanitarias son mensajes colocados en los paquetes de productos de tabaco y otros canales de distribución o medios de promoción, publicidad y patrocinio de estos productos, que describen los efectos nocivos del consumo de tabaco, así como sus componentes y emisiones. De acuerdo al Convenio Marco para el Control del Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dichas advertencias y mensajes deben:
- Ser aprobados por las autoridades nacionales competentes;
- Ser rotativos;
- Con mensajes grandes, claros, visibles y legibles;
- Ocupar el 50% o más de las superficies principales expuestas;
- Consistir en imágenes o pictogramas, o incluirlos
La evidencia científica demuestra que las advertencias sanitarias son el medio más directo y prominente para comunicarse con las personas fumadoras, reducen la imagen positiva sobre los cigarrillos y aumentan su imagen negativa y aumentan la percepción del riesgo y el conocimiento sobre los daños en la salud del consumo de tabaco